Ropa de caza

En la prehistoria la caza de animales fue utilizada para solventar los problemas de alimentación del hombre. Fue evolucionando hasta llegar a ser considerada como un deporte. Sin embargo, practicar esta actividad requiere una preparación, y esto incluye contar con ropa de caza adecuada que te permita desenvolverte así como mantenerte protegido.

La caza es una actividad que se realiza cada vez con más frecuencia y que en la actualidad es practicada por ambos géneros. Tanto hombres como mujeres como mujeres sienten pasión hacia esta. Para realizar este tipo de actividades, se debe contar con unas condiciones físicas determinadas, así como calzados y vestimentas determinadas.

Es de hacer notar que, se considera cazador o cazadora a toda aquella persona que realiza la caza como actividad y que además cumple con ciertos requisitos como: tener 14 años o más, poseer licencia para cazar, así como la autorización del dueño del coto o sitios donde se realiza este tipo de actividad.

¿Por qué usar ropa de caza?

Al momento de realizar este tipo de actividades se hace necesario contar con la indumentaria necesaria, que le facilite la realización de la misma. Recordemos que a pesar de que cada cazador o cazadora tiene su estilo propio, deben usar ropa de caza que les ayude a adaptarse a las condiciones del terreno.

Dentro de la indumentaria adecuada encontramos: camisetas, guantes, botas, chalecos, sombrero, gorras, chalecos, cazadora, chamarras y pantalones. Este tipo de ropa debe resultar bastante cómoda y poco ruidosa. La finalidad es que facilite la movilidad del hombre y no espante a la presa.

Pantalones

Esta prenda debe estar hecha de tela de pana o tela militar. Además deben disponer de bolsillos amplios distribuidos a lo largo del pantalón, para que se puedan guardar instrumentos o herramientas. Es importante señalar que, los bolsillos siempre deben cerrar de alguna manera, bien sea utilizando botones, velcro o, mejor aún, cremallera. En cuanto al color, se recomienda marrón o verde.

Chamarras

Una de las piezas indispensables desde el punto de vista de éxito y de seguridad cuando decidimos ir de caza, son las chamarras. Debemos estar muy atentos al momento de escogerlas. Al colocarnos en un punto fijo, estas deben ser amplias y al mismo tiempo contar con bolsillos con botones o cremallera, para colocar toda nuestra documentación.

Chalecos

Generalmente están hechos de algodón y suelen ser reversibles, resultando el interior del mismo de color naranja, con la finalidad de hacer visible a quien lo usa. Además, cuenta con múltiples bolsillos y compartimentos, que le permiten al cazador guardar materiales o elementos necesarios para la caza. Este tipo de ropa, resulta muy útil cuando la caza se realiza en sitios cálidos.

Cazadora

A diferencia del chaleco, este tipo de indumentaria es muy utilizada. Esta resulta muy útil, principalmente si la caza se realiza en sitios o temporadas frías. Por lo general deben ser anchas para facilitar la movilidad del cazador y además contar con bolsillos provistos de botones o cremalleras.

Botas

Estas son inherentes a cada cazador. Sin embargo hay características que son comunes para todos, como: deben ser por encima del tobillo para evitar que penetren insectos o piedras dentro de las mismas. Además, estas deben mantener seco el pie, y a una temperatura cálida. Su peso debe ser ligero, para evitar que las presas sientan el movimiento de la persona.

Sombrero

Esta prenda suele ser utilizada en clima cálido o donde hay sol. La razón es que este ayuda a protegerse de los rayos solares y al mismo tiempo evita deslumbramientos. Cabe destacar que, en la mayoría de los casos están elaborados de tela flexible, para facilitar su guardado sobre todo en los bolsillos. Deben ser de colores neutros o de estilo camuflaje.

Guantes

Son necesarios principalmente en ambientes hostiles o fríos. Se considera que para maniobrar el arma resultan muy útiles. Es bastante común que el tipo de guantes que se utilizan son los conocidos como mitones, en los que los dedos quedan expuestos. Además la palma del guante se caracteriza por ser adherente, generando un mejor agarre. Dependiendo del clima se escogerán los guantes del material idóneo.

Camiseta

De la vestimenta utilizada, esta es una de las más importantes. Se caracterizan por ser de algodón, nunca de fibra y deben ser utilizadas en cualquier temporada. Si se trata de invierno nos protege del frío. En el caso del verano, absorbe el sudor, impidiendo que la camisa se adhiera al cuerpo.

Mantenimiento de las botas de caza

Las botas es una de las prendas de ropa de caza más importantes. Para el cuidado de estas, se hace necesario tomar una serie de medidas que las harán más duraderas en el tiempo. Por lo que no será necesario comprar varios pares de botas.

Si deseas mantenerlas en excelente estado, en primer lugar se hace necesario ventilar las botas. Para ello es necesario retirarle los cordones y las plantillas. También es importante retirarle toda la suciedad que está adherida al cuero. Se aconseja usar un jabón neutro, cepillo y agua tibia.

Es necesario que se coloque un impermeabilizante que las proteja del agua previamente absorbida. Regularmente se les debe cubrir con crema especial para el mantenimiento del cuero y hay quienes sugieren airearlas con un secador de pelo para fijar la crema.

Cuidado y mantenimiento de la ropa de caza

Al momento de cuidar la ropa utilizada para la cacería, es necesario tener en cuenta tres pasos importantes como lo son: lavado, secado y planchado de la ropa.

• Lavado: en cuanto a este paso, lo primero que hay que saber es que es necesario lavar la ropa antes de usarla por primera vez. Luego de usada, si presenta manchas es necesario lavarla a mano con agua fría. Luego se coloca en la lavadora en agua fría o máximo a 30º. Esto permitirá que mantenga sus propiedades, es decir, las cremalleras termo-selladas y la impermeabilidad.
  Cabe destacar que, para el lavado el tipo de detergente utilizado es jabón neutro. No debe emplearse suavizante así como ningún otro producto que pueda dejar olor en la ropa de caza. Además, una vez que culmina el lavado, esta no puede pasar más de 20 minutos dentro de la misma. Si no se cumple esto, puede perder los colores.

• Secado: debido al tipo de tejido, no se recomienda el uso de secadora, ya que esta puede provocar que la ropa se encoja, o pierda su color. Por lo que lo recomendable para el secado es al aire libre.
• Planchado: como se trata de un tipo de ropa considerado como delicada, no es recomendable hacer uso de la plancha con este tipo de prendas. Las temperaturas elevadas causan daños irreparables en los tejidos. Se recomienda colgarla bien extendida en una percha.