Cómo elegir un seguro de caza
El seguro de caza es indispensable. No importa si eres profesional o principiante. Para tu tranquilidad, necesitas un seguro que cubra accidentes personales o de terceros.
En España es obligatorio que contrates seguros de caza, por lo que si piensas dedicarte a este deporte, es de las primeras cosas de las que tienes que preocuparte.
Sin embargo, sabemos que los seguros llegan a ser muy costosos y merman considerablemente nuestras finanzas si no contratamos uno calidad-precio.
En la siguiente publicación te explicaremos cómo elegir un seguro de caza. Mencionaremos aspectos esenciales que no pueden faltar a la hora de contratar una de estas pólizas de caza.
Tabla de contenidos
Cómo elegir un seguro de caza ideal
Tipo de seguro
Los seguros juegan un papel importante en las actividades de caza. Por ejemplo, imaginemos que resultas herido, y necesitas asistencia inmediata. Un seguro cubrirá los gastos asociados a los accidentes sufridos para que no salgan directamente de tu bolsillo.
Son básicos y fundamentales. Sin embargo, no todos los seguros son iguales. Algunos solamente protegen al cazador, mientras que otros amplían la cobertura a terceros o a las armas.
Debes conocer bien los tipos de seguros y pólizas que existen, cuáles son sus características y hasta el tipo de riesgo que cubren.
Tenemos al de responsabilidad civil, que es el mínimo exigido por las leyes para dedicarse a la caza. Es un importe que cubre los daños causados a terceras personas. O el de accidentes personales, que se encarga de las heridas y los percances sufridos por el cazador durante la actividad.
Luego hay otros, como el de protección jurídica, que cubre los honorarios de abogados en casos de los problemas lleguen a los tribunales o demandas recibidas mientras se practicaba el deporte.
El daño a perros, que cubren las contingencias sufridas por tus compañeros y las asistencias veterinarias. E incluso hay cobertura a los daños que reciban las armas y los percances en el extranjero.
Es importante evaluar cada una de las condiciones y, por supuesto, el precio de los seguros. No quieres contratar algo que escape de tu presupuesto, pero que tampoco que te deje expuesto.
Por ejemplo, si crees que puedes cubrir los daños a las armas, o tienes varias en casa, no hay necesidad de agregar esta cobertura a tu seguro.
La clave está en sentarte, anotar cada una de las especificaciones del seguro y descartar los que no significan un peligro importante para ti o puedes cubrir financieramente.
Precio
El precio suele ser un buen termómetro a la hora de contratar un seguro. El error que cometen muchos principiantes es elegir el más económico.
Sí, pagarás menos, pero estarás más expuesto. En caso de un accidente, todo el dinero saldrá de tu bolsillo, porque no tienes cobertura para competiciones, siniestros en el extranjero o si fueron los perros los perjudicados.
La aseguradora
A la hora de escoger una aseguradora hay que saber si se trata de una empresa especializada o diversificada. Es decir, si solamente se dedica al nicho de la caza o su cartera incluye esta actividad.
Lo más sensato es que optes por una aseguradora especializada, ya que te ofrecerá un mejor servicio, atención y pólizas de protección.
Investiga todo sobre la aseguradora: quiénes son, cuántos años de experiencia tienen en el sector y, sobre todo, si es contrastada.
Revisa las reseñas y toma en cuenta tanto los puntos positivos, como los negativos.
Compara las tarifas
Ahora que conoces los aspectos más importantes al momento de contratar un seguro, solo te queda comparar las tarifas y contratar el adecuado.
Nunca escojas la primera opción que veas. Por muy bonita que parezca. Tomate el tiempo de recopilar información sobre las aseguradoras y compáralas para saber si te conviene, o no, tanto en cobertura como en precio, contratar ese seguro o mejor otro.